lunes, 29 de junio de 2009

.....?

“El misterio más grande de mi vida: ¿Por qué no me suicido? Es en vano alegar mi pereza, mi miedo, mi futilidad. Quizás debido a esto, todas las noches me parece haber olvidado algo”.
Alejandra Pizarnik

viernes, 8 de mayo de 2009

prefiero

Prefiero definitivamente tantas cosas que pesan mucho más que tantas otras... Prefiero, por ejemplo, jugar con tus manos cuando afuera la gente escapa de la lluvia como si esta fuera a corroerles lo poco que les queda de alma. Prefiero, a veces, embriagarme de esos ojos negros que saludan y se despiden en la rutina inciática de los segundos que escapan de las metáforas para trasladarse de espejo en espejo hasta las innumerables razones de lo translúcido. Prefiero, entonces, aún entonces, abstraerme en tu risa, esperar a recibir a cuenta gotas los infinitos motivos que me das para amarte.

lunes, 4 de mayo de 2009

faroles

- Buenas tardes mi querida Parca... Hace cuánto tiempo andaba esperándote? Acaso eres tu clarividente, o tan solo un poco perceptiva... O solo una tecnóloga en esto de los finales que anda con una lista a la espera de la culminación.

- Buenas noches mi querida Parca... ahora tejiendo como siempre tan juiciosa en los quehaceres habituales... No quiero salir mi querida parca, está haciendo mucho frio afuera y el abrigo me resulta insuficiente. La vida ya no me sabe a nueces y las sobras del mostrador no son más que cianuro maloliente.... Si viera señora que ahora no duele, si viera que ahora no importa si las vísceras se derriten detrás de la parafernalia que armó la piel a diestras y siniestras (mías y ajenas), ahora no importa si la cinética se escabulle en los rincones del subespacio... No importa nada porque importa todo, y si las palabras coinciden o no, tampoco es cosa suya... Lo suyo es llenar listas y convertirlas en campanarios, filas de carros y gente de negro.

- Buenos días mi querida parca... discúlpame si te entretengo con minúsculas pero el tiempo no da espera, y tú que ni consideras la falta o la necesidad de tan coqueto detalle, no tienes por qué ocuparte de asuntos tan despreocupantes para una señora de tan alta alcurnia....

- "Buenos días, buenas tardes, buenas noches"
Y se apagan los faroles....

viernes, 24 de abril de 2009

?3

Y es ahora cuando regresan las palabras: 11:44 pm... El cerebro está presto para la discreción y la seriedad de los ligamentos y la patología; los hallazgos son claros, y la mente clarividente. La noche no es musa, el amor tampoco... Las musas han decidido descansar de tanto descalabro mediático, y prefieren ocultarse en la seguridad de las avalanchas de gente. Y la música de nuevo trasladándose entre uno y otro giro, devorando los pocos intervalos de silencio que le quedan al tiempo, y trasponiéndose a la oscuridad como luciérnagas que nunca duermen, pues siempre encuentran quehaceres en las sombras resultantes de los intentos fallidos de la luz por alcanzar la omnipresencia... Es tan sencillo como la armonía misma del ahora y el entonces, el había una vez, y el quizás después... La agenda está repleta de tareas insignificantes que se olvidarán más temprano que tarde, y cuyas repercusiones desconocemos por carecer de la habilidad psíquica de las probabilidades... Mañana hay que estudiar, así como pasado mañana, y luego escapar de las multitudes que esperan impacientes el momento preciso para transformarse en obstáculos. Mañana hay que trabajar, porque la globalización, o porque el sistema, o porque si, o porque no, o porque no hay poesía que pueda ofrecerse a cambio de tranquilidad, o porque no hay dolor que pueda aliviarse por sí solo. Se perdieron de nuevo... Ojalá no existas, lector.

lunes, 20 de abril de 2009

.....A ti....

Las invitaciones están prestas! A la danza y a la embriaguez.... No te canses corazón, que aún nos falta caminar y caminar aunque desandemos espacios y regresemos siempre, encontrándonos en el mismo pero siempre diferente abrazo... Espera paciente o desespera con ansias, como desespera el alma cuando descubre que ha surgido de las brazas o de las fábulas o de las cavernas o del éxtasis de la fascinación. Mira mis letras como estallidos eléctricos de un corazón que se deshace y rehace a cada tic tac del reloj zigzagueante que declara la inminencia del retorno, o la inminencia del te quiero que recorre las venas y culmina su recorrido en un silencio de aquellos en los que pasan las ánimas que escapan del purgatorio para confundir raciocionios irrevocables, o en los que simplemente se decide sellar con un beso lo que las palabras no abordan por esto del kilometraje. Vive con el cuerpo cansado pero exhuberante de vida, vive con el alma herida pero ingenuamente dispuesta a las promesas irrefutables de la felicidad... Vive conmigo, y vive para tí, y mientras me ahogo en los confines y sinfines de las eternas contradicciones de esos ojos tristes y dichosos, de niño, de sol o de viento en placentero ocio, déjame perderme en tus manos, perderme para volver a encontrarme y reconciliarme...

sábado, 11 de abril de 2009

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Otra vez comienzo discutiendo con ellas: que si, que no, que quizás, que tal vez... Y me dejan esperando las muy desgraciadas a sabiendas de mi escasa paciencia. Las necesito visibles e impresas, impuestas o sobrepuestas, aún me conformo con sus sibilancias, aún me conformo con murmuraciones y risitas... Pero las necesito para darle un nombre o un sinónimo, para abordar así sea tangencialmente los confines y sinfines de la historia que ahora sí es mía. Las necesito para decir te quieros, para recriminarle al tiempo sus cínicas limitaciones, las necesito inermes, miopes siempre pero danzantes muletillas o reivindicaciones de plastilina.

sábado, 31 de enero de 2009

?

Acá no hay más que silencio, y esa misma frase se torna tan repetitiva, como el hecho de que se me olvidó ordenar las palabras y ahora se creen las muy independientes por la anarquía a las que han sido sometidas. Hablar tanto de palabras y sentirlas tan ausentes, estar y no estar como estando en un lugar sin que este exista, tan cierto y tan falso como mis dedos aporreándolas, fracturando el tiempo a ver si depronto por obra y gracia de su alter ego, llego a sentir algo distinto a lo que siempre ha sido y será... Ya predestinada, qué más voy a hacer? preparar un café, llevar la vajilla a la cocina, y esperar a que las ondas del electrocardiograma cojan paticas y hagan un lindo bailesito para mí.

lunes, 26 de enero de 2009

Alguna vez.... 3° Parte


La diestra y la siniestra haciendo de las suyas en ese compaz que siguen perversas las notas musicales en armonioso conjunto con las letras y los signos. La más tonta pero definitivamente bella de las profundidades traducida en un par de cuencas a la espera, simulando estúpidamente, como siempre, que no esperaban nada, y que el llamado "nomeimportismo" de antaño (que palabra tan fea), seguía opacando el "si lo quieres"... definitivamente... si lo quieres... Y el silencio rodeado por el ruido... Shhhhh!! es una biblioteca, y esa tendencia obsesiva de tomarse todo tan al pié de la letra (quizá a modo de reverencia) permite ocultar esas mismas señoras que nos habíamos lanzado a la cara tantas veces como si fuese un juego de almohadas en las que algún mañoso con ínfulas de asesino y una capacidad muscular por encima de la media, decidió cambiar plumas por ladrillos. Caminar solo o caminar con el dueño de las cuencas, ja ¡Valiente diferencia! Y eso se debe precisamente a que caminar sola entre sombras resultaba un placer tan dolorosamente dulce como caminar con... el dueño de las cuencas... Y la gente... (¿Había gente?)... No se ni para qué la menciono. Y una piedrita que depronto resulta revolviéndose con la ocurrencia más cursi de todas las cursis ocurrencias, pero tan infantilmente franca como que esa piedrita se me parecía a un beso.... Antes o después.. El principito despierta y decide que su rosa está bien sola, y que tal vez encontrarse con esa señora espectral que tiene al frente, no es del todo malo, y que resumirlo todo en un solo de tiempo, es más sencillo que continuar con las peleas de almohadas...

domingo, 25 de enero de 2009

Medicina

Alguna vez....2° Parte

Y una vez más, no la primera, ni la segunda, pero si la primera en un claustro dedicado a cuadricular cabecitas que ya estaban medianamente moldeadas por toda esta cuestión de la socialización primaria...Ese rincón, nuestro rincón... Esa canción, nuestra canción... Ese árbol y sus desprendimientos fétidos de buena suerte, los mangos, las hormigas... Tal vez sea demasiado claro mi temor a evidenciarme, quizá porque ya lo hice tiempo atrás (es decir, el alguna vez que a tí corresponde), o porque ella lo hizo en mi lugar como suele suceder cuando se convierte a un ser humano en depósito de confianza (menudo crímen)... Voy por las gafas, ya vuelvo... Embriaguéz ortostática... Pero ahora nada de eso importa; ni los miedos, ni los temores, ni la diplopia, ni la escoliosis, ni el café, ni el frio... Ahora el enfoque es horizontal, el pecho está fracturado y el gasto cardíaco tan estable como siempre.

miércoles, 14 de enero de 2009

Alguna vez.... 1° Parte

La cordura y la locura se desencontraron cuando por cuestión de indecisiones, decidieron perderse la una de la otra por siempre y para siempre... Regresan otra vez, así como son, organizaditas y en filita india, a la espera paciente de ser secuencia y consecuencia. erguidas, casi todas, y extraña y paradójicamente en femenino, y claro está, en plural, porque solo recuerdo algunas de ellas como supervivientes exentas de la pluralidad (yo y mi reincidencia sintáctica)...
Ahí estaba precisamente el cuadro perfecto de la sinrazón saboreándose una chupeta de somnífero. El beso, definitivamente el beso marcando el reborde perfecto para una escena que no puede más que recibir la tilde persistente de la cursilería. El beso que se pidió y que se rogó, que casi que se imploró, aún cuando no lo sabías por andar ocupado con esos asuntos de oriente, o de asia menor, o si me atrevo a pensar en la cantidad de cruces taxonómicos, vaya ud a saber de dónde viene aquella que con todo descaro, dada la ventaja que brinda el anonimato, puedo denominar como " tu especimen". Circuitos ilógicos y absurdos, y la hermandad, y los lazos de sangre que no se si recuerdas, son uno más de los imaginarios que a veces nos inventamos (cuando digo nos no eres tú, ni soy yo, somos muchos en temporadas psicóticas) para darle una excusa (o un excusado) a esa inmunda palabrita que se me atora en la glotis con el desparpajo de un cuerpo extraño. Y la indiferencia, y la no indiferencia, que es peor aún que la indiferencia...
Y la guitarra, y el piano, y las voces al unísono que desconocen por completo su situación de simultaneidad... Descarto el papel de observadora.

martes, 13 de enero de 2009

Definitivamente las palabras no tienen sentido, ¿O es que ya le encontraste alguno? Yo no, y por eso estoy acá dando las mismas vueltas sin sentido sobre las mismas redundancias sin sentido entre los mismos giros sin sentido que da un reloj que no sabe de sentidos aunque piense que el suyo definitivamente está hacia la izquierda. Escribir es tan pero tan insulso, ¿O es que acaso no te has dado cuenta de ello? tus divagaciones, tus profundas y dulces y tristes y lúgubres y tontas divagaciones, no te han indicado tal vez por casualidad que es absurdo todo este absurdo?
Si, hablar en primera persona, si, el sustantivo, el verbo, las conjunciones, los adverbios, la frase como finalidad, la finalidad como frase indiscutible e imperceptible en todo esto que llevamos por tiempo envuelto entre las agendas... Las agendas, y los diarios, y las noticias, y tu, y yo, y quizá aquel señor que mira con desconfianza al otro señor que trata de lidiar con un paraguas que no abre ahora, precisamente ahora que no llueve. Las confesiones... ¿Has visto cómo es el hilo de las confesiones? (estuve a punto de escribir confusiones, te das cuenta lo cerca que están?)... Y que te quiero, y que te odio, y que pienso en ti, y que no te pienso nada, y que te olvido, y que no te olvido nada... Ay dolor, cuanta basura en unas cuantas lineas!

sábado, 10 de enero de 2009

Esa misma señora que mencionábamos con relativa constancia, como si su identificación en pleno discurso cuasisicótico se estableciera como una poca ingeniosa forma de invitarla a la sala de espera. La otra señora también toma el té en la tarde, y dispone de todos los muebles de modo que nadie se atreva a interrumpir sus alcurniosos sorbos. Ambas miran, conversan como si hallaran entre ellas similitudes tan bastas, como los rebordes de las camas y los encajes de las cortinas. El silencio se adueña de todos los espacios, y no hay rincón que permita el rebotar sibilante de las notas musicales, porque la física no es permitida cuando hay costurero, y las irreverencias son exclusividades que solo se permiten cuando ya estableces una relación tan cordial con la primera señora, que su amenaza constante es omitida dado que la invitación ha sido aceptada y finiquitada.
Muerte y Soledad... Que bonitas palabras.
Silencio y punto aparte.

jueves, 8 de enero de 2009

Cuando todavía las aguas no estaban controladas y los ríos en su desborde arrasaban los campos, la diosa madre procreó benéficos descendientes que terminaron ordenando ese caos diluvial.

Trabajando en el control de los ríos, de los lagos, del mar y de las nubes, los brillantes dragones navegaron por las aguas y el cielo. Con zarpas de tigre y garras de águila, rasgaban con estruendo las cortinas de lo alto que chispeando ante el descomunal embate dejaban en libertad a las lluvias.

Ellos dieron cauce a los ríos, contención a los lagos y profundidad a los mares. Hicieron cavernas de las que brotaba el agua y por conductos subterráneos las llevaron muy lejos para que surgieran de pronto, sin que el asalto abrasador del sol las detuviera.

Trazaron las líneas que se ven en las montañas para que la energía de la tierra fluyera, equilibrando la salud de ese cuerpo gigantesco. Y muy frecuentemente tuvieron que luchar con las obstrucciones que provocaban los dioses y los hombres ocupados en sus irresponsables afanes.

De sus fauces brotaba como un humo la niebla, vivificante y húmeda, creadora de mundos irreales. Con sus escamosos cuerpos serpentinos cortaban las tempestades y dividían los tifones. Con sus poderosos cuernos; con sus afilados dientes, ningún obstáculo era suficiente, ningún enredo podía permanecer.

Y gustaban de aparecerse a los mortales. A veces en los sueños, a veces en las grutas, a veces en el borde de los lagos, porque en éstos solían tener sus escondidas moradas de cristal en las que bellos jardines se ornaban con frutos destellantes y con las piedras más preciosas.

El Long inmortal, el dragón celeste, siempre puso su actividad (su Yang) al servicio del Tao y el Tao lo reconoció permitiéndole estar en todas las cosas, desde lo más grande a lo más pequeño, desde el gran universo hasta la partícula insignificante. Todo ha vivido gracias al Long. Nada ha permanecido inmutable salvo el Tao innombrable, porque aún el Tao nombrable muda y se transforma gracias a la actividad del Long. Y ni aún los que creen en el Cielo y el Infierno pueden asegurar su permanencia.

Pero el Long ama al Feng, al ave Fénix que concentra el germen de las cosas, que contrae aquello que el Long estira. Y cuando el Long y el Feng se equilibran el Tao resplandece como una perla bañada en la luz más pura.

No lucha el Long con el Feng porque se aman, se buscan haciendo resplandecer la perla. Por ello, el sabio arregla su vida conforme al equilibrio entre el Dragón y el Fénix que son las imágenes de los sagrados principios del Yang y el Ying.

El sabio se emplaza en el lugar vacío buscando el equilibrio. El sabio comprende que la no-acción genera la acción y que la acción genera la no-acción. Que el corazón de los vivientes y las aguas del mar, que el día y la noche, que el invierno y el verano, se suceden en el ritmo que para ellos marca el Tao.

Al fin de esta edad, cuando el universo haya llegado a su gran estiramiento, volverá a contraerse como piedra que cae. Todo, hasta el tiempo, se invertirá volviendo al principio. El Dragón y el Fénix se reencontrarán. El Yang y el Ying se compenetrarán, y será tan grande su atracción que absorberán todo en el germen vacío del Tao. El cielo es alto, la tierra es baja; con esto están determinados lo creativo y lo receptivo... con esto se revelan los cambios y las transformaciones.

Pero nadie puede saber realmente cómo han sido ni cómo serán las cosas, y si alguien lo supiera no podría explicarlo.
El que sabe que no sabe es el más grande; el que pretende que sabe pero no sabe, tiene la mente enferma. El que reconoce la mente enferma como que está enferma, no tiene la mente enferma. El sabio no tiene la mente enferma porque reconoce a la mente enferma como la mente enferma.

*Leyenda de China.

miércoles, 7 de enero de 2009

Prometeo Encadenado


"-A las palabras han seguido los hechos. La Tierra vacila, y el trueno
ruge sordamente en sus profundidades; en zigzagues inflamados
estallan los rayos en el aire y el furioso Cielo levanta el polvo en
torbellinos. Los vientos todos se precipitan unos contra otros; se
ha abierto entre ellos la contienda, y el aire y el mar se confunden.
He aquí la fuerza desatada lanzada con toda certeza contra mí
por la mano de Zeus, para infundirme espanto. ¡Oh majestad de
mi madre!, ¡oh éter, que haces girar alrededor del mundo la luz
que nos alumbra a todos, contemplad las iniquidades que he de
padecer!
(Resuena un trueno horrísono; las rocas saltan en pedazos y PROMETEO
queda sepultado en ellas.)"